El poeta Independentista, Determinación y Pensamiento

Después de que el 17 de febrero de 2007 Raúl Ibañez de Garaio publicase un texto en la prensa denunciando la situación a la que se le estaba sometiendo a un preso político vasco en huelga de hambre, y por la condena a casi cien años más de presidio que se le impuso a este ciudadano por escribir y publicar dos artículos en la prensa que denunciaba al sistema carcelario, cual fue la sorpresa que el texto de Ibañez de Garaio apareció con frases censuradas, silenciadas y otras manipuladas. Quisieron deformar y distorsionar la denuncia manifiesta.
 
Esos días el poeta fue sometido a seguimientos, control, vigilancias y otras conculcaciones de derechos civiles y políticos y que realmente venían de años atrás, del siglo pasado. Seguimientos y demás violaciones de derechos para evitar que el poeta insurgente independentista pudiera publicar y denunciar, dada la tensión y el pulso que había aquellos días. Los represores sabían que si el filósofo lo denunciaba públicamente las cosas podían cambiar como así sucedió.
 
El 20 de febrero de ese mismo año el periódico de Alava publicó una aclaración con una de las frases clave que había sido censurada días atrás en el texto que el poeta había llevado a la prensa. Pero Raúl Ibañez de Garaio fue más allá y les llevó éste artículo que fue publicado diez días después, exactamente fue publicado el 1 de marzo de 2007.
 
Ese mismo día a la mañana el preso político vasco era trasladado al hospital de Donostia desde los cientos de kilómetros que le separaba de una cárcel inhumana y una dispersión que viola los derechos humanos.
Después de su recuperación éste preso político vasco quedó en libertad.    
 
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INVIERNO, PUEBLO, DETERMINACIÓN Y PENSAMIENTO
 
 
Ya ha caído libre la nieve sobre esta tierra, el invierno así lo ha determinado. Las estaciones como la blanca noche se sacuden el alma. Eso debe ser el proceso, el proceso es la conciencia echando andar, y el progreso su desarrollo cuando evoluciona. Ahora el campo blanco verde… se transforma como una crisálida. Porque la primavera contiene sus frutos como la siguiente. Y ya no puede haber un discurso que nos encierre en su jaula. Ni una voz que nos quite la palabra. Con ella fuimos a vendimiar sus triunfos y el tiempo nos reclamo entre sus verdades.
Ni juez ni político alguno puede hablar en nombre de un pueblo para robarle la voz. Ya sentimos el corazón de las aves. Para que a nadie le quede más preguntas entre los dientes. Y sólo la palabra quede firme en el universo. Eso es lo bello ahora que llegamos a tiempo, nadie puede detener un pensamiento sin espantar el aire mientras huye despavorido. La luna brilla en el paladar de la noche. Y ya hemos tocado cielo con las manos a pesar de la distancia.
 
1-3-2007
Raúl Ibañez de Garaio