Más de veinte mil armas nucleares están en manos de ocho países: Estados Unidos, Rusia, Francia, Reino Unido, China, Israel, India y Pakistán; varios de ellos con profundas diferencias económicas, políticas y religiosas.
El nuevo tratado START, suscrito en Praga en el mes de abril entre las mayores potencias nucleares, no implica más que ilusiones, con relación al problema que amenaza a la humanidad.