El 17 de abril de 1996 fueron asesinados en la localidad de El Dorado dos
Carajás, en el Estado de Pará, diecinueve campesinos del Movimiento Sin Tierra
de Brasil. A raíz de este hecho, conocido internacionalmente como la masacre
de El Dorado, se fijó el 17 de abril como Jornada Mundial de la Lucha
Campesina.
Como forma de recordar y conmemorar, las organizaciones de campesinos,
indígenas, trabajadores y de consumidores de alimentos de todo el mundo, se
movilizan, se expresan e invitan a las organizaciones sociales y populares a
manifestarse también en esta jornada contra el modelo agropecuario de las
grandes corporaciones económicas y de los organismos internacionales de
comercio y finanzas (FMI, OMC, Banco Mundial), y a favor de un desarrollo
rural con campesinos y con biodiversidad y sin transgénicos.