Con más miedo que vergüenza, así me siento al observar horrorizado (a la vez que avergonzado) la firma del pacto por el cual nos van a subir la edad de jubilación hasta los 67, gracias a los denominados agentes sociales (y por supuesto al queridísimo gobierno).
67 años, tiemblo nada más oír esa cifra, me cuesta hasta creer que esto vaya a pasar de verdad. A este paso,¿ qué será lo próximo?.