ya sé lo de las tradiciones y todo eso, pero estaría bien que empezaramos a llamar a la fiesta de la primavera, o de mayo, o de las flores, o de la fertilidad por su nombre, sin tirar por "conveniencia" de esa simbología tan represora como opuesta al carácter original tan vital de esta fiesta inmemorial.
qué cruz,
ya sé lo de las tradiciones y todo eso, pero estaría bien que empezaramos a llamar a la fiesta de la primavera, o de mayo, o de las flores, o de la fertilidad por su nombre, sin tirar por "conveniencia" de esa simbología tan represora como opuesta al carácter original tan vital de esta fiesta inmemorial.
un abrazo y allí nos vemos!
un alérgico a las cruces