Entidades Sociales reclaman otro modelo de Metro en Sevilla
El planteado por la Junta lo entienden irrealizable, insostenible e irracional.
Diversas asociaciones presentan hoy la “madre de todas las alegaciones” al anteproyecto de red: defienden una red básicamente en superficie. Porque es más congruente con los estudios técnicos, incluidos los oficiales; más sostenible; y mucho más barata. De manera que tendría mucho más garantizada su construcción a un costo y un plazo razonables y, además, se haría posible dotarla de imprescindible carácter metropolitano del que carece.
Entidades sociales en pro de un mejor uso, ordenación y habitabilidad de la ciudad y el territorio presentan hoy sus alegaciones a la propuesta de red de metro, que pueden resumirse en un “replantéese el asunto desde la raíz”.
La elaboración de las mismas no ha sido fácil, dado el escaso plazo habilitado por la Junta, que ha alcanzado los dos meses (en vez del único previsto inicialmente) por la presión de varias entidades; dada la ingente cantidad de información, que no se facilitó en soporte digital (aunque no vía web) hasta el segundo mes de exposición, también a petición ciudadana; y dadas las muy poco propicias fechas veraniegas y vacacionales elegidas para efectuar dicha exposición. “Coincidencias” estas, recurrentes hasta decir basta, que algún día lograremos que dejen de darse.
En síntesis, el proyecto (entendiendo globalmente los tres anteproyectos), que sólo atiende al término municipal de Sevilla, implicaría la realización parcial, de aquí a 2017, de una mini-red de metro subterráneo a un elevado coste -en torno a los 1.000 millones de € por línea (a razón de 60-80 millones/km.)-, con las siguientes características:
Se obvia casi totalmente la realidad metropolitana de Sevilla. En este sentido, rechazamos de plano el debate inútil sobre la ubicación de las paradas del Centro Histórico dado que estos tramos aún no están ni siquiera programados.
Se obvian las nuevas realidades y experiencias de transporte público en superficie (nuevos tranvías, peatonalización, bicicletas públicas, intermodalidad,…) que a un coste muy inferior se están desarrollando con éxito en ciudades de todo el mundo, y a las que Sevilla, afortunadamente, no ha sido del todo ajena en los últimos años.
Se necesita para su realización de una ingente inversión pública, que ni está ni estará disponible en muchos años debido a la crisis; y que, en el supuesto de que pudiera realizarse en un plazo razonable (no más allá de 2018-2020), implicaría paralizar otras actuaciones de menor coste, menor plazo de ejecución y mayor utilidad pública.
Se corre así el riesgo de un nuevo parón -como los que sufrieron los proyectos fallidos de 1970 y 1990- en la búsqueda de soluciones reales a la movilidad metropolitana. Por lo que entendemos que es absolutamente necesario iniciar un amplio debate ciudadano sobre qué modelo de transporte público queremos para el Aglomeración Urbana de Sevilla (AUS), sin ideas preconcebidas ni prejuicios a favor de éste o aquél modo de transporte, con el objetivo de formular el mejor modelo posible.
A este respecto, la técnica de la movilidad sostenible apunta a la opción en superficie como la más adecuada. Esto ha sido entendido por ciudades en situaciones similares y también diferentes a la de Sevilla.
Un metro fundamentalmente soterrado es una apuesta antigua, cara y que no será eficaz en la situación urbana y metropolitana de Sevilla. Además, no será realizable. Cuando el peso de los hechos recaiga sobre la opción soterrada, habrá de replantearse y adoptar la opción en superficie, habiéndose perdido un tiempo y unos recursos que, en la situación actual, son preciosos.
Así pues, en esta alegación planteamos que la opción de metro más eficaz, eficiente y a todas luces factible será un metro que cree una malla completa de transporte público en superficie no más allá del horizonte del 2018-2020. Esta es la única opción para que la red de metro pueda ser:
Metropolitana: que conecte todos los núcleos importantes de población del Área Metropolitana, incluyendo proyectos ya en estudio como las conexiones con Coria-La Puebla, Camas-Valencina, Mairena-Bormujos-Gines, … así como otros por estudiar, que completen una auténtica y funcional red de conexiones metropolitana, que suponga una alternativa efectiva al masivo uso actual del coche particular.
Ecológica: que suponga un descenso real en las emisiones de gases de efecto invernadero ligadas a la movilidad urbana y metropolitana, y que sea compatible con el desarrollo a escala metropolitana de otras políticas de sostenibilidad y habitabilidad urbanas ya probadas en Sevilla, como la peatonalización o la red de vías ciclistas.
Económica: que suponga un uso eficiente de los recursos públicos.
Y en plazo: estamos convencidos de que es posible desarrollar de aquí a 2017, y por el mismo coste que la "fase inicial" (1.000 millones de euros y 18 km) propuesta en el anteproyecto, una red básica de transporte público metropolitano fundamentalmente en superficie que dé solución a los problemas de movilidad metropolitanos (1.000 millones de euros y 50 km.), aportando una renovación urbana muy sustancial, ventajosa y apreciable en parámetros de movilidad sostenible y habitabilidad urbana. Solución que no puede esperar a la finalización de la carísima mini-red de metro subterráneo restringida al municipio de Sevilla que el anteproyecto contempla, y que el propio anteproyecto deja indefinida en el tiempo.
Entidades firmantes:
Asamblea Ciclista de Sevilla, “A Contramano”; Aljarafe Habitable; Asociación en Defensa del Territorio del Aljarafe (ADTA); Ecologistas en Acción y Valencina Habitable.
NOTAS:
El documento de alegaciones completo.
Tras estos enlaces pueden escucharse dos amplias entrevistas radiofónicas sobre estas alegaciones: Entrevista 1, Entrevista 2