Manifestación en defensa del río Castril ( Granada)
Enviado por Anónima el Jue, 16/09/2010 - 21:08.
Esto es lo que el Estado de derecho, con todas sus garantías jurídicas, tiene preparado para quienes se atrevan a intervenir directamente en el gobierno de sí mismos y no estén dispuestos a que la razón de Estado y la sinrazón de la economía aniquilen sus medios de vida. Así serán tratados quienes pretendan torcer en algún punto el curso de esta devastación planificada y sostenible en que consiste el actual programa de gobierno, que, por muy actual que sea, sabe no obstante aplicar sin reparos aquel viejo principio, bien conocido por todos los despotismos, según el cual un lugar devastado es un lugar sometido. Pues allí donde no queda nada que conservar, no quedará nadie que resista.
MANIFESTACIÓN EN DEFENSA DEL RÍO CASTRIL
Domingo 26 de septiembre en Granada
Salida: Plaza del Carmen, 12 h.
CORTES DE BAZA, ESTADO DE SITIO
El 15 de diciembre de 2006, valiéndose de un Real Decreto previo por el que se autorizaban "medidas administrativas excepcionales para la gestión de los recursos hidráulicos", el Consejo de Ministros aprobaba por vía de urgencia la construcción de una conducción de abastecimiento desde el embalse del Portillo hasta Baza: 25 kilómetros de tubería paralela al río Castril, 220 litros por segundo bombeados a una estación potabilizadora en las faldas del Cerro de Jabalcón para hacerla llegar a distintas localidades de la comarca. Después de dos siglos de proyectos delirantes (canal navegable Castril-Cartagena en el siglo XVIII, trasvase Castril-San Clemente en los años 80, etc., etc.), la razón de Estado daba al fin con la excusa y los medios para vencer la tenaz insumisión del río Castril y sus gentes. Lo que no logró ni el absolutismo ilustrado ni el liberalismo desamortizador, y tampoco el fascismo tecnocrático de sendas dictaduras, está a punto de consumarlo, con el pretexto de una sequía y un Decreto ambos caducados, esta moderna adminsitración del desastre que ha encontrado en el estado de excepción ecológico la técnica de gobierno definitiva: la que le permite aplastar cualquier disidencia, proseguir la devastación en nombre del interés general y ocultar, bajo capas aún más densas de falsa conciencia, las verdaderas causas históricas de un desastre que ella misma produce y planifica.
Por supuesto, y a pesar de la guerra sucia vivida meses atrás en Castril, la oposición popular se ha organizado una vez más. Pero esta vez la administración está dispuesta a llegar hasta el final, cueste lo que cueste; la represión no se está ahorrando ninguno de sus medios: teléfonos intervenidos, amenazas, calumnias periodísticas*, seguimientos, controles policiales permanentes, militarización de la zona; alrededor de cuarenta vecinos denunciados por vía administrativa (tendrán que hacer frente a multas de 3.000 y 4.000 euros, acumulables, por participar en manifestaciones pacíficas) y varios de ellos, considerados "cabecillas" por los mandos policiales, imputados además por vía penal. De lo que se trata, naturalmente, es de infundir cuanto antes en quienes protestan un sentimiento agudo de impotencia, de miedo y desánimo, objetivo principal de los amos cuando comprueban que un movimiento de oposición está encontrando sus verdaderas razones y está acertando a expresar la voluntad popular con respecto a un asunto público. Una capacidad semejante ha de ser quebrantada cuanto antes y, para ello, ningún medio de coacción, ningún recurso a la mentira o a la manipulación está descartado, como están comprobando los habitantes de toda la comarca.
Esto es lo que el Estado de derecho, con todas sus garantías jurídicas, tiene preparado para quienes se atrevan a intervenir directamente en el gobierno de sí mismos y no estén dispuestos a que la razón de Estado y la sinrazón de la economía aniquilen sus medios de vida. Así serán tratados quienes pretendan torcer en algún punto el curso de esta devastación planificada y sostenible en que consiste el actual programa de gobierno, que, por muy actual que sea, sabe no obstante aplicar sin reparos aquel viejo principio, bien conocido por todos los despotismos, según el cual un lugar devastado es un lugar sometido. Pues allí donde no queda nada que conservar, no quedará nadie que resista.
Pero Cortes de Baza resiste. Porque la gente de Cortes no ha perdido la dignidad, y tampoco la inteligencia de las verdaderas causas de este abuso y de las consecuencias irreparables que tendría su ejecución: "arrastrar la vida del país hacia la capital y no dejar en el resto del territorio más que una existencia muerta, monóntona y estéril". El pueblo de Cortes todavía sabe lo que es un paisaje hermoso, un río vivo y una tierra que consiente en rendirle sus frutos; tiene, por lo tanto, una noción muy clara de qué cosas no deben tolerar quienes aspiren a llamarse libres. Por eso está luchando: porque sabe que la libertad no está en las leyes que dicen salvaguardarla, sino en los hombres y en las mujeres que tengan el valor de actuar libremente. Por eso se ha tomado la libertad de decir NO:
NO al autoritarismo de las medidas de emergencia
NO a las falsas necesidades que conducen al expolio de los ríos
NO a la destrucción del pasado y el porvenir de todo un pueblo
¡CORTES NO SERÁ DOBLEGADA! ¡CORTES RESISTE!
GRUPO SOLIDARIO DE APOYO A CORTES DE BAZA
Y EN DEFENSA DEL RÍO CASTRIL
MANIFESTACIÓN EN DEFENSA DEL RÍO CASTRIL
Domingo 26 de septiembre en Granada
Salida: Plaza del Carmen, 12 h.
* NOTA SOBRE CALUMNIAS PERIODÍSTICAS: De la larga lista de manipulaciones, medias verdades y silencios sepulcrales con que los medios de comunicación han ido cubriendo este asunto, comentamos aquí tan sólo el más reciente ejemplo, que pudo oirse el pasado 7 de septiembre en la principal emisora de la provincia. Aquel día, y por un momento, el incalificable dúo cómico que ameniza las mañanas de la cadena SER se puso serio. Se trataba de una primicia exclusiva, de una revelación definitiva gracias a la cual "las cosas" empezaban a "desenmascararse" [sic]: el verdadero motivo de "unas movilizaciones totalmente absurdas", quedaba, por fin, desvelado. Gracias a la perseverancia, la audacia, la valentía profesional y la rectitud ética de estos heraldos del rigor, y a un vídeo colgado en la red por los propios vecinos de Cortes, el empecinamiento incomprensible de ese puñado de fanáticos que decían oponerse al "mal llamado trasvase" para evitar un "desastre ecológico", entregaba su secreto: "CUESTIÓN DE DINERO. Todo es cuestión de dinero, siempre el maldito dinero". ¡Así que era eso! El oyente podía respirar tranquilo, cuando no indignado. Sublimes alforjas de ecologismo y de amor a la tierra para un viaje tan materialista y tan vulgar; si bien, por otra parte, tan "too-tal-men-te legítimo", como enfatizaba el locutor. Porque estos vecinos de Cortes, que llevaban meses movilizados por razones hasta ese momento insondables, clamando porque su vega iba a ser destruída ("totalmente mentira"), porque su río se iba a convertir en un secarral ("totalmente mentira"), en realidad lo que quieren es lo que todo el mundo: dinero, "más dinero", money, plata, cash. Esto, el locutor de la SER, acostumbrado a poner su voz y sus luces al servicio de los concesionarios de coches, las casas de empeño y las salas de alterne con que se financia su aguerrido periodismo de investigación, sí que podía entenderlo; pero, qué carajo, que hubieran empezado por ahí; porque "si lo que quieren es que se les pague, están tooo-tal-men-te en su derecho. Pero que no nos cuenten otras milongas ni desvíen la atención por otro lado".
"Estas cosas", concluía el locutor en una de sus castizas y proverbiales apostillas, "tiene la vida: que, más tarde o más temprano, todos terminamos retratados". Por una vez, sin embargo, la imagen retórica tenía un sentido menos figurado de lo que parecía, y se ajustaba a la verdad incluso sin quererlo, pues el mismo vídeo que tanto había hecho salivar en la redacción de la SER estaba sirviendo, muy cerca de allí -al otro lado de la calle como quien dice-, para que el Subdelegado del Gobierno terminase de identificar y de denunciar a los participantes en las movilizaciones de Cortes. Efectivamente habían sido retratados. Detalle éste que nuestros reporteros más dicharacheros olvidaron mencionar, sin duda porque no quedaba tiempo: había que dar paso a la publicidad. (Fuente: http://riocastril.com/audio/cadena_ser_7_9_2010.mp3).
Enviar un comentario nuevo